Vurkina en Ciudad Techno: todes a la pista
⚡ Por San Moltedo y Mauri Villafañe
📷 Ferr Medina
El viernes 23, en la última curva del calendario que lleva a la recta final del año, se siguió celebrando el segundo aniversario de Ciudad de Gatos (17 e/ 69 y 70) y se lo hizo de la mano del dúo de techno local Vurkina. "Se siguió" porque los festejos arrancaron a mitad de semana con un DJ Set de Peces Raros y con noche de vinilos el jueves. El viernes, con las chicas rompiendo esa pista, no fue de siluetas sino de baile desenfadado y lleno total. La comunidad felina, agradecida.
Hace dos años que en esta ciudad gótica y diagonal se proyecta, desde Meridiano V, una gateseñal. Es una invitación a un punto de encuentro y producción cultural gratuita y de calidad, a un lugar que genera trabajo y disfrute entre su gente y a una onda muy particular. Nos sentimos como en casa en CDG; los festejos de su aniversario #2 fueron uno de los platos principales de la movida artística platense de fin de año y en ellos estuvimos junto a Vurkina, danzando fuerte, para saber que hay una Ciudad que cumple.
La densidad del tiempo en su transcurrir cotidiano se disipó con la llegada la medianoche. Empezó a tomar otra velocidad y otra textura, más expectante y dinámica, acorde con la composición del tiempo- lugar: una noche primaveral de viernes en una casa- cervecería colmada de gates. Son en esas coordenadas que aparecen nuestras heroínas de la noche: Val Spirito y Vik Jauregui, socias en ese asunto del techno que tan bien llevan adelante y que conocemos como Vurkina.
Todes a la pista. Tocaron, bailaron e hicieron bailar por horas, manteniendo el pulso de la noche en lo más alto siempre. La conexión cuerpos- bandejas- luces- espacio funcionó a pleno y generó un clima y una sinergia que encontró un paisaje no solamente sonoro sino también conceptual, hipnótico y dinámico, que es propio de la música digital en general y del techno en particular.
En la ciudad diagonal, escuela de todos los ritmos y cantera de mil tendencias y subgéneros, aparece, se consolida y crece la música electrónica. Resiste, convoca y desafía preconceptos mediáticos, culturales y gubernamentales. Vurkina es parte de esa onda y va más allá: se producen. Van ya dos ediciones de Avalancha de Techno, la propuesta que tienen y de la que prometen una tercera muy pronto. De fondo está la lucha por visibilizar acerca del acceso igualitario de las mujeres a los escenarios y a la gestión de propuestas culturales independientes.
Tenemos devoción por Simon Reynolds y su "Después del rock...". Aborda, desde la perspectiva sonora y conceptual, el análisis de las múltiples dimensiones del post- rock y en esa senda nos lleva a la música digital. Su no- instrumentalidad "real" la emparenta con las artes plásticas más que con las mini-novelas/historias literarias que sustentan la lógica de la canción rock; propicia y crea un ambiente imaginario cruzado de texturas, colores y timbres que, al calor de la repetición y el ritmo, se vuelve real a través del goce de los cuerpos en movimiento.
El avance tecnológico y su aplicación a la música ha expandido el concepto, poniendo en segundo plano la búsqueda melódica, orgánica e incluso las voces e instrumentos "reales". Re-crea la percepción del tiempo, lo loopea hacia un presente continuo, inmediato y presumiblemente eterno; lleva al cuerpo a un no-lugar de sensibilidad por la materia sonora y conceptual que brota de las bandejas.
¿Hay una búsqueda artística en hacer que la gente baile? ¿El/la que toca, baila? ¿Pueden las frías y post- humanas máquinas conmover? Vurkina, con trabajo honesto, capacidad creativa y virtuosismo técnico, en su Ciudad (de Gatos) Techno, hizo que CULTURA DIAGONAL y todes les presentes pongamos una cruz, sin dudarlo ni un instante, en el casillero del sí.